lunes, 16 de noviembre de 2015

¿Prefiero estar sola que mal acompañada o prefiero estar sola que ser una mala acompañante?

He estado pensando que definitivamente quiero estar sola por un buen tiempo. Hoy hace cuatro años tal vez era un día en el que estaba feliz, un día tan feliz como todos los que tuve en la relación que viví con quien considero que fue el amor de mi vida. Sí, hace cuatro años era noviembre de 2011, el año en que comencé esa relación. Probablemente estaba en ese periodo que llaman "los gloriosos", pero ahora que lo pienso, a pesar de las muchas peleas que tuve con ese hombre, mientras estuviera enamorada eso era gloria y era más gloria aún mientras yo creyera que él también estaba enamorado de mí. A pesar de todo, siempre creí que el estaba enamorado de mí.

Hoy, gracias al cielo me he bajado de esa nube en la que estuve montada cuatro años. Pero cuántos golpes de pecho me he dado por boba! En serio, fui de otro mundo, fui la más ilusa del planeta Tierra al creer que quien era mi novio podía ser tan cien por ciento fiel  como yo, que podía amar tan puramente como yo. Qué pelotis yo . Han pasado seis meses después de la ruptura y aunque aún me considero muy bobita por haber creído semejantes payasadas en ese tiempo, ya lo puedo visualizar como una experiencia que me ha dejado gratos aprendizajes para la vida y las cuestiones del amor.

Creo que con lo que escribo, quien me lee pensara que estoy dolida y sí, tengo razones para estarlo. Pero qué tal que hubiera escrito cuando apenas estaba asimilando las cosas, ahí si que estaba mal. Pero bueno, lo importante es que ahora estoy mucho mejor, tengo una nueva forma de ver la vida, el amor, las relaciones... Es un poco desolador el panorama porque creo que el amor verdadero no existe, pensé que era lo que había entre nosotros dos pero no, eso no era. Sin embargo hay hombres y mujeres que se entienden como pareja en todos los sentidos, se genera un sentimiento mutuo, la pasan bien juntos, se preocupan el uno por el otro y eso es "amor". Bien por esas personas. Pero realmente lo que yo esperaba del amor verdadero era algo muy similar al cuento que me creí cuatro años, donde la fidelidad y lealtad era lo que consideraba más importante.

Por ahora, me siento extraña. No se qué tan reciente sea lo que vivi, el desengaño, eso. Pero creo que me queda muy difícil pensar en a qué otra persona voy a dejar entrar a mi vida para compartirla. O mejor,  creo que por ahora no quiero intentar nada, no se qué pase a futuro. Pero ahora que tengo una nueva forma de ver las relaciones entre parejas. Y uno, no le encuentro mucho sentido a las relaciones que se juntan porque sí, mucho menos a quienes están con alguien, por no estar solos. Dos, estoy convencida de  que uno se "enamora" una sola vez en la vida. Creo que esa vez ya me pasó. Y por el momento (yo no sé qué pase luego), no se qué sentido tenga ilusionar o empezar una relación con una persona  por quien uno sabe casi con total certeza, que no va a llegar a sentir lo que solo se siente una vez en la vida.

lunes, 20 de julio de 2015

La mente(razona) y el corazón(ama)

De vez en cuando pienso en que quiero publicar una entrada en mi blog, este blog. Quería hacerlo cuando por fin tuviera cosas buenas para contarles, pero hoy 20 de Julio me dio por entrar y me dieron ganas de copiar lo que sea.

Han pasado al menos quince días desde mi ultima publicación, creo; o menos o más, pero estoy segura de que si fue en el mes pasado. Hoy no tengo nada para mí genial que escribir, sigo estando a la espera de cosas que quizás no van a pasar y que por lo que me he dado cuenta en los últimos días, cada vez se hace más probable que no sucedan. recuerdan mi primera entrada, si, esa misma en la que publiqué sobre mi ruptura sentimental, esa, si. Pues hasta ahora todo ha ído empeorando a pesar de que he pueso todo mi empeño y mis mejores energías para lograr lo que quiero. Por cierto no se si sepan bien que es lo que quiero. Rompí mi relación con mi ex novio hace casi dos meses, los motivos son muchos pero como leí por allí  lo que importan no son las razones sino el hecho en si, llevo aproximadamente dos meses de vivir en la esperanza de volver con él porque si terminé la relación no fue porque no lo amara. realmente siento hasta ahora que es el amor de mi vida, lo amor profundamente y sigue siendo esa única persona con la que me despierto y me acuesto en el pensamiento. Él lo sabe por supuesto, se lo he hecho saber porque por cierto, yo no he querido perder el contacto con él a pesar de que el no ha tenido ni un milímetro de interés por saber de mí (sólo lo intentó como quince días después de la ruptura y nunca más), y a pesar de que hace como ocho días me confesó que alguien le estaba llamando la atención.

 Como pueden ver no tengo esperanzas verdaderamente razonables para esperar que él vuelva conmigo, siento que me superó y de hecho hace mucho más tiempo que lo que llevamos de haber terminado la relación. Presiento siento, que hace mucho más tiempo él veía las cosas muy irregulares, tal vez ya había centrado su atención en otra persona, tal vez, no sé la verdad. Hemos tenido un par de encuentros después de eso, en los cuales la conclusión ha sido, que le prefiere un tiempo, una vez dijo que tiempo para sanar, otra vez dijo que tiempo para no se qué, otra vez dijo que yo estaba feliz sin él. Luego apareció ELLA, esa tercera persona del singular que me trabaja en la mente muchas de las horas del día; cuando apareció ella obviamente fui entendiendo para qué necesitaba tiempo. ¿Qué estará pasando en este absurdo tiempo donde ya existe otra persona? tal vez saliendo con ella, pasando sus fines de semana y ratos libres con ella, bueno, eso hace parte de todo lo que mi mente se imagina, y a la vez todo eso me va destruyendo poco a poco a mi, pero construyendo muy lentamente la idea de que definitivamente lo tengo que sacar de mi vida y de mi corazón para siempre,

He estado leyendo a la señora Penélope Parker, de hecho, bueno, conseguí leerme su libro sobre el regreso de los hombres en menos de una semana, me lo recomendó una compañera de mi clase de inglés. Allí encontré una motivación especial para preparar mi cara de despedida para él, en la cual le hago saber que definitivamente su confesion de la tercera persona ha sido un puno crítico para que yo vea que definitivamente él no es la persona por la que debo seguir contra la corriente, veo que leer ese libro le ha trabajado bastante a mi mente, me he encontrado con que he podido llegar a concluir que él definitivamente ya no me amaba y ya no me ama, pero cabe aclarar que entre la mente y el corazón definitivamente la diferencia es bien grande, la una razona, el oro recuerda, ama y espera. Y qué piedra en serio tener un órgano tan bobo, espera sanar heridas muy profundas causadas por personas que ni siquiera se cuestionan qué pasa con él.



No tengo mucho qué decir por ahora, en estos momentos estoy a la espera de poder entablar una conversación en persona con él para entregarle las cartas correspondientes a mi despedida sin tocar el tema, para nada. Pero realmene quisiera tener su compañía, dialogar con él, de otras cosas por supuesto, disfrutar de esa presencia deliciosa del hombre que amo, pero por supuesto con las totales fuerzas para que no se me escapen las palabras imprecisas, los besos que he deseado darle, pues ya no tiene sentido, espero actuar con elegancia pero sin romanticismos.

Espero poder escribir lo más pronto posible, qué pasó en la cita que espero tener, de la cual no tengo esperanza alguna, pero sí es importante para mí, por lo de la carta en la cual le quiero hacer saber mis ganas de dejarle ir.

miércoles, 24 de junio de 2015

El "comienzo" de mi historia

Empezaré por decir que yo podría haber jurado que tenía a mi lado el único hombre en el mundo que parecía que no perteneciera a la tradicional expresión "todos los honbres son iguales". En mi tiempo de noviazgo, o al menos en esos primeros tres años de esa relación cuando la gente decía eso, yo simplemente pensaba para mis adentros: "oh por Dios, realmente soy afortunada" y claro, uno de pelota se lo decīa a él; le hacía saber que él era un hombre único en el mundo. Realmente él tenía cosas muy bellas, era detallista, respetuoso, educado, se preocupaba por mí, agradecido, buen hijo, parecía fiel,  etc.

Pareciera ser que me quiero hacer la víctima y no la culpable. Como pueden imaginarse, efectivamente en este momento ya no somos nada, para la claridad de algunos (as). No me gusta parecer víctima, de hecho no digo que lo soy porque pudo haber algo tal vez mío que hizo que todo lo bello de nuestra relación se volcara, el cambiara su forma de ser como novio y cambiara tambien su posición frente a los planes y proyectos que como pareja teníamos y finalmente yo tomara la angustiosa y rabiosa decisión de terminar.

Eso ha sido de lo más teso que me ha pasado en mis años como adolescente y como adulta; aún mucho más que el saber y recordar que de adolescente el chico que me gustaba nunca me correspondió. Me gustaría hacerles saber que mi terminada no fue algo tan horrible como imaginaba, he estado tan ocupada con mis estudios que decidí prestarle toda mi atención a eso que es bien importante para mí,  y bueno, no es que quiera decir que no me importó, de hecho lloré mucho cuando al tercer día de la decisión como que caí en cuenta de que era en serio, ahí me di cuenta que lo había perdido; luego les contaré que era lo que hacía que yo definitivamente pensara que "esto ya no va más". Estuve enferma además, tuve algo así como una especie de desorden nutricional no planeado, o sea, no era una anorexia, una bulimia, o cosas de esas, no. Había dejado de comer en ocasiones por estrés, por ansiedad, en ocasiones me sentía depresiva, no sé. Creo que realmente tenía que ver con los afanes de la vida universitaria.

Volviendo al tema, ha pasado exactamente un mes desde que terminamos y la gente que averigua por el chisme de " en serio? Terminaron? Cuándo? Una relación de cuatro años? No te creo" normalmente coincide en preguntar cómo me siento o en afirmar " uy me imagino cómo estas", o en cuestionarme "has llorado mucho? Y no te ha llamado? Ya le hablaste? Crees que vuelvan? " y un sin fin de preguntas y afirmaciones que a continuación daré respuesta:

-Si, en serio, parece increíble pero es real.
-Terminamos? Si, terminamos. Yo terminé.
-Hace x dīas dependiendo de la fecha que me preguntaran.
-Si, llevábamos todo ese tiempo pero tomé esa decisión.
-Si, estuve mal el primer día hasta el tercero o cuarto luego de...
-No he llorado tanto como yo misma me imaginaba o como la gente cree que estaría.
-No me ha llamado.
-Si, hemos hablado pero no trascendentalmente como para uno decir que vamos a volver.
-No creo que volvamos pero mi corazón desligado de la razón tiene la esperanza. La razón, mi razón, no quiere ni tiene tal esperanza.

De las anteriores respuestas hay una que para mí es muy interesante, porque tiene que ver con la experiencia de vida que realmente quiero compartir. Más adelante les hablaré de eso. Estará especialmente dedicada  a aquellas chicas que el hecho de terminar una relación las ha dejado destrozadas y mejor dicho creen que ahí termina su vida. Voy en mi medio de transporte masivo, mío no. Del municipio, de la ciudad, de todos, si. En fin, me duelen las manos de copiar.

Saludos a todos!

Saludo especial a aquella primera persona que me lea. También a aquella que de primeras, comente.

domingo, 21 de junio de 2015

¿Quién es JustDulceMaría?

¡Hola!

Pues bien, esta es mi primera entrada en este espacio que acabo de crear. Para ir al grano, este blog surge de la necesidad de querer expresar aquellas cosas que me sorprenden tanto, que no soy capaz de decírselas ni a mi mamá ni a mi mejor amiga, porque si para mi que soy aguantadora y tolerante me parecen wow, se que si las comento por ahí van a terminar haciendo que me sorprendan aún más y me generen aún más sentimientos sobre sentimientos.

Después de la carreta absurda que acabo de echar arriba, en el primer párrafo diré quién soy. Soy una mujer, tengo 22 años y mi nombre no es Dulce Maria. Si, es lo que algunos (as) de ustedes están pensando: no quiero revelar mi verdadera identidad, solo quiero expresar lo que siento y lo que pienso pero en serio me da "cosa" revelar cuál es mi verdadero nombre.

El seudónimo de "Dulce María", surge de que ese es el nombre que siempre he querido ponerle a una futura hija. Me parece muy lindo, además quién inicialmente lo tuvo fue una niña de una telenovela mexicana que no me perdía cuando era niña. Me encantaba la novela y la niña realmente era una Dulce María.

En cuanto a mi, revelaré además que soy estudiante, soy colombiana, vivo feliz y orgullosa de mi país Colombia; para quienes me lean y no sean de aquí les quiero decir que Colombia es una tierrita hermosa, la gente de acá es muy feliz. Como todos los países tenemos nuestros problemas y todo, y ya muchos sabrán por qué nos identifican en el resto del mundo. Pero a pesar de eso, qué belleza de tierra, qué gente tan cálida, que amor le tengo a esta esquinita de Suramérica.

Siguiendo, pues bien, soy estudiante universitaria. Estudio una carrera hermosa relacionada en gran medida con las ciencias naturales, es una ingeniería pero me parece que es un tanto diferente al resto de las demás, sin quitarle méritos a ninguna carrera, de hecho siento que las demás ingenierías y las otras carreras son muy tesas, son conocimiento y el conocimiento es sencillamente una cosa maravillosa. Yo vivo feliz de aprender cada día algo nuevo en mi carrera.

Bien, hasta ahora nada de lo que he escrito tiene que ver con esas cosas que no expreso oralmente, sin embargo pensé que las personas que lean todo esto,  a lo mejor querrán saber quién escribe todo esto. Soy una persona por decirlo así, del común. No soy famosa, soy de clase media, tengo metas, sueños y un proyecto de vida por ejecutar.

Ya en otra ENTRADA, les empezaré a hablar de lo que me sorprende o cosas así propias de la intención de este blog. Por ahora, este es un poco de quién es Dulce María.